¡Abrid las fronteras!

Abrid las fronteras es el grito de las mujeres y los hombres, niños y niñas detenidas en la fronteras; entre Grecia y Macedonia, entre España y Marruecos, entre México y USA ... Su protesta es símbolo de todo lo que piden otros miles y miles de personas en migración, detenidas en todo el mundo: ¡Abrid las fronteras! es y debe ser nuestro lema.

Abrid las fronteras es también el grito contra la matanza de personas que no llegaron a su destino. Es lo que piden los parientes de los más de 30.000 muertos y desaparecidos en el Mediterráneo contabilizados desde el 2000. Si por las fronteras se permitiera el paso de los seres humanos y no sólo el de las mercancías, las personas no es verían obligadas a tratar con las mafias y los traficantes.

Manifiesto unitario 18D. Puedes firmarlo aquí

Abrid las fronteras y dad la bienvenida a quien se escapa de la guerra y de la violencia económica en busca de un futuro. Esta es nuestra respuesta a la persecución, al terror, a las bombas, a la pobreza y al hambre. No sólo la solidaridad entre iguales ha de ser nuestra arma contra las fronteras, sino también la crítica y la presión constante hacia quienes las gestionan así como un desmantelamiento de todo el sistema racista que se encarga de negar (de forma violenta y oculta) la libre circulación, mientras hipócritamente enarbola la bandera de la solidaridad ante los ciudadanos europeos.

Hoy nos unimos contra los gobiernos de la Unión Europea y sus Leyes de Extranjería que niegan a personas inmigradas, ya establecidas en territorio europeo, el derecho a los papeles y a la plena ciudadanía, a la sanidad, y a una vivienda y un trabajo dignos. No callaremos ante los medios de comunicación que siembran el miedo y la alarma ante la persona migrada.

Los gobiernos que ahora hablan de defender y respetar una "generosa acogida" son los mismos que siguen viendo la migración como una vulneración de fronteras y no como una crisis humanitaria, que continúan construyendo muros, concertinas y CIE 's, y que usan la policía en el su formato más represivo.

El número de personas migrantes en el mundo ha tocado un nuevo máximo histórico este año y se estima que se superarán los 232 millones de personas (el 3,2% de la población mundial). El número de personas migrantes y refugiadas llegadas a Europa ha superado los 264.000 este 2015. Según las Naciones Unidas hay un total de 60 millones de refugiados en el mundo. Se trata del movimiento de personas más grande desde la II Guerra Mundial. No todas vienen de Siria, sino que en las rutas en territorio europeo se unen personas de otras nacionalidades que huyen porque son perseguidas por razones de raza, religión, nacionalidad, pertenencia a un grupo social particular, u opinión política, pero también por exclusión social, violencia económica o riesgo medioambiental. Una violencia generalizada que viola los Derechos Humanos.

Mientras, el auge del fascismo y el racismo en Europa es una realidad. Los grupos abiertamente nazis como Alba Dorada y Jobbik atacan e incluso asesinan personas inmigradas. En Francia el partido fascista del Front National lleva las tesis ultras a las instituciones. Las acciones y declaraciones racistas y islamófobas de muchos gobiernos europeos, lejos de hacer frente a los fascistas, les dan la razón y les ayudan a crecer.

Los Gobiernos europeos cierran fronteras, hacen que miles de personas mueran en el mar, y aprisionan en campos de concentración a las personas que consiguen llegar.

En la frontera con Marruecos, España vulnera los derechos humanos con vallas sangrientas, torturas, deportaciones y palizas. Pero nosotros tenemos memoria y no olvidamos. Porque aquí también sufrimos, cuando el miedo y la violencia es apoderaron de nosotros, en tiempos de nuestros padres y madres, abuelos y abuelas. Recordemos la misma migración forzada por la guerra, el hambre y la violencia económica. Y cuando nos tocan a una, nos tocan a todos.

Por esta razón, una vez más este 18 de diciembre 2015, el Día del Migrante, se celebra la Jornada de Acción Global contra el racismo y por los derechos de las personas migrantes, refugiadas y desplazadas. No es un motivo de celebración sino de movilización.

Este año, además, en España es un día doblemente significativo ya que coincide con las elecciones generales del 20 de diciembre donde, mientras las personas migrantes no pueden votar, algunas candidaturas enarbolan el miedo hacia ellas para captar votos.

¡Porque defender sus derechos significa defender los derechos de todos y todas!  Inmigrantes, refugiadas y desplazadas. Todas somos iguales. Todas somos personas. Todas somos Migrantes!

¡Abrid las Fronteras!